Aunque soy cristiano, tengo una tendencia a ser pesimista. Pero los acontecimientos recientes han restaurado completamente mi fe en la humanidad.
Tantas personas respondieron a mi petición de ayuda la semana pasada, y algunos de ellos ni siquiera hemos conocido aún en persona. Es la hora para mostrar mi humilde gratitud.
Tantas personas respondieron a mi petición de ayuda la semana pasada, y algunos de ellos ni siquiera hemos conocido aún en persona. Es la hora para mostrar mi humilde gratitud.
Yeyette en el hospital, un día después de su parto e histerectomía. Las flores son de mi hermana Jennifer. |
Más de una docena de personas, de una u otra forma, nos ayudaron durante este episodio más difícil de nuestras vidas. De parte de mi mujer Jennifer "Yeyette" Perey de Alas, me gustaría dar mi agradecimiento especial a estos ángeles: mis hermanas Jennifer y Jessica, mi suegra Teresa Atienza de Perey y su paisana Jene Alfaro, mi suegro Jaime Perey, la Familia Catáquiz de San Pedro Tunasán (la srᵃ alcaldesa Lourdes Catáquiz, su marido Don Calixto Catáquiz, su hijo Aris Catáquiz, y su sobrino León Buenavista), mi tío Ramón Alas, el gran filipinista Señor Guillermo Gómez Rivera, Antonio Marques Sans (salimos del hospital principalmente a causa de él), Shee-Ann Meneses, Diego Pastor Zambrano, José-Rodaniel Cruz, Luis María Cardaba Prada, nuestra vecina Flor Junio de Pérez (por cuidar de nuestros otros niños durante nuestra estancia en el hospital), Ronald Yu, Sylvia Santos de Pineda (bisnieta de Marcelo H. del Pilar), Jennalyn Carmona y Jingky Sumañga (respectivamente del departamento de facturación y una enfermera de St. Clare's Medical Center), y mi mejor amigo Arnaldo Arnáiz.
Gracias también a los médicos que trabajaron arduamente para salvar la vida de Yeyette: la ginecóloga obstetra Drᵃ Catherine Pujol de Azores y su cirujano marido Dr. Rouel Azores, el anestesiólogo Dr. Gerald Vita, y otra ginecóloga obstetra Drᵃ Orpha Montillano de Corrado.
Junífera Clarita en el cuarto del bebé del hospital. |
Y por supuesto, mil gracias también a todos los innumerables y valiosos amigos y parientes nuestros que oraron por la seguridad y recuperación de mi mujer y nuestra nueva bebé, Junífera Clarita. ¡Muchas gracias a todos ustedes! Gracias por el apoyo y el aliento espiritual y moral. Yeyette ahora disfruta de su segunda vida en la Tierra con nuestros cinco hijos hermosos. Somos muy afortunados de tener a todos ustedes en nuestras vidas.
¡Hogar, dulce hogar! |
¡Enaltecer la familia para la gloria más alta de Dios!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario