lunes, marzo 21, 2011

Las últimas novedades sobre la enseñanza del idioma español en Filipinas

Hace un mes (26 de febrero), una noche muy fría y fresca, el Señor Gómez y yo asistimos el cumpleaños de la Señora Ésther Cortés en su residencia espaciosa en Urdaneta Village, Ciudad de Macati. Ella es una lectora de esta bitácora sencilla y es la mujer encantadora del Señor José Miguel Cortés, uno de las juntas directivas de Asian Development Bank. Los Cortés son muy amables; se portaron como si fueran los filipinos con su hospitalidad y amabilidad. Ellos "son de lo mejorcito que se puede encontrar de españoles en Filipinas", según mi amigo Manolo Pérez. Y estoy completamente de acuerdo con lo que me dijo.

La pareja dio una fiesta fabulosa en su hermoso jardín, y el aire de la noche se llenó de Sevillanas. Qué lástima... ¡no traje mi cámara esa noche!

En la misma fiesta conocí el Señor Alfredo Roca, CEO de Fuego Hotels y presidente de la Cámara de Comercio Española de Filipinas. Es una persona muy humilde, y mostró su apoyo y agradecimiento a ALAS FILIPINAS por su defensa del idioma español.

Y por la primera vez conocí también otro lector de ALAS FILIPINAS, el Señor Francisco Javier Menéndez, asesor de educación de la Embajada de España en Manila. Para aquellos que siguen esta bitácora, se recordará que el Señor Menéndez me envió un correo el 3 de agosto de 2009 felicitándome por mi defensa de la lengua castellana en Filipinas. Y para mí, ese corrreo de un caballero español muy estimado e importante es uno de los grandes honores que he recibido alguna vez sobre mi bitácora.

Como el asesor de educación de la Embajada de España en Manila, el Señor Menéndez trabajó en estrecha colaboración con ex-Presidenta Gloria Macapagal de Arroyo, ex secretario Jesli Lapus del Departamento de Educación, y José Rodríguez, el director actual del Instituto Cervantes de Manila, para reintroducir la lengua castellana en Filipinas. Hemos que recordar que cuando Arroyo visitó España a finales de 2007, ella hizo una declaración al gobierno español que fuere a hacer una iniciativa para devolver el idioma castellano en Filipinas.

Y a pesar de sus faltas, ella cumplió su promesa lingüística.


Jesli Lapus en Instituto Cervantes de Manila.

Señor Menéndez me dijo que cuando empezaban este proyecto, hubieron 19 escuelas seleccionadas para enseñar los alumnos filipinos (en la secundaria o high school). Pero ahorita, ¡hay aproximadamente 54 escuelas que enseñan este idioma por todas partes del archipiélago! Verdaderamente, ¡es una gran noticia para la patria filipina!

Le pregunté de donde sacan los instructores. Dijo que debido a la realidad de escasez de instructores en este idioma, tenían que contratar a graduados de la Universidad de Filipinas (los estudiantes con un título en el idioma español). Y aseguró que la calidad de la enseñanza es lo suficientemente bueno.

Sin embargo, David Salcedo Sánchez de Cagayán de Oro, Misamis Oriental me informó que unos oficiales del Ateneo de Cagayán o especificamente los que supervisan la enseñanza del idioma español allí no eran sincero en la enseñanza de la lengua. Enseñan el castellano con indiferencia, meramente para ganar el privilegio como una de las escuelas experimentales que volvió a introducir el español en la región de Mindanáo. Si esta información es exacta, entonces espero que las medidas más estrictas se aplique para garantizar la calidad (Y LA PASIÓN) de la enseñanza del español en todas nuestras escuelas.

Por último, le pregunté al señor Menéndez quien realmente pensó de la idea de traer de vuelta la lengua española en Filipinas. ¿Fue la Srª. Arroyo o el Señor Lapus? Es que yo tenía mis dudas sobre la sinceridad de Arroyo. Pero sin pensarlo dos veces, el asesor de educación respondió que la idea es de Arroyo, no de Lapus. Aunque el Sr. Lapus trabajó mucho para realizar este proyecto nacionalista, la idea tuvo su origen de la mente de Arroyo.

Necesito ponerme en contacto con el señor Menéndez un día para que pueda saber más actualizaciones del estado de la enseñanza de nuestro idioma filipino querido: el castellano.

Francisco Javier Menéndez, Jesli Lapus, y (nos guste o no nos guste) Gloria Macapagal de Arroyo: héroes modernos de la lengua española en Filipinas. Todos ellos merecen el prestigioso Premio Zóbel.

Pero ¿dónde está el Premio Zóbel durante estos días de renacimiento español en Filipinas?

2 comentarios:

ROQUINTOS dijo...

Amigo Pepe, Soy Jesus Rodriguez Canes te admiro por tu empeño por llevar el español a todos los rincones de Filipinas, no ceses en tu proposito.
Sigue asi. Un saludo.

Anónimo dijo...

Amigo Pepe, todo mi apoyo esta contigo.Enhorabuena por le trabajo bien echo!!! alfrredo roca