miércoles, febrero 18, 2015

Filipinas, no Philippines

El nombre de mi país es FILIPINAS, no Philippines. No importa si un filipino habla en inglés o con una persona de habla inglés. En cualquier idioma, el nombre propio que un filipino se utiliza para referir al país debe ser FILIPINAS por la razón sencilla que no somos WASP usenses. Ya estábamos filipinos, incluso antes de los "americanos" nos invadieron. Nuestra identidad es hispánica. Nuestra identidad fue formada durante de más de tres cientos años dentro de la matriz amada de Madre España.

¿No les han dado cuenta? Las otras hijas de Madre España: Argentina, Bolivia, el Perú, México, Uruguay, etc. no tienen nombres equivalentes en inglés. Pues, ¿por qué insistir de llamar a nuestro país como Philippines o Pilipinas (el segundo es una abominación de los nacionalistas retorcidas y equivocadas)? Si nosotros filipinos debemos considerarnos como hispánicos también, pues necesitaríamos negar esta abominación llamado Philippine Identity y devolver la identidad auténtica basada en la hispánica que es la IDENTIDAD FILIPINA.

Imagen de Gelaxyblog.

Llamar nuestro país como FILIPINAS en vez de Philippines o Pilipinas es un buen comienzo.

martes, febrero 10, 2015

Un saludo introductorio en español de mi hijo Mómay

Ayer mi hijo Mómay se unió en un concurso de su escuela. Se llama Campus Star, el concurso mostró los más guapos y guapas estudiantes en el Liceo de San Pedro. Mómay pronunció su saludo introductorio no solo en inglés sino también en español. Fue el único contendiente que habló así.


Mómay no ganó el concurso. ¿Tal vez porque los jueces no entendieran español básico? Nunca lo sabré (por cierto, recibió un gran aplauso después). Lo único que sé es que Mómay se ve como yo, ¡jejeje!

Y Mómay fue el único estudiante en ese concurso que llevaba Filipiniana.

Sin embargo, ¡todavía estamos muy orgulloso de él porque realmente hizo muy bien con su saludo introductorio! Mi hijo es tímido pero caminaba y hablaba en el entablado con facilidad. Pues, lo más importante es la experiencia y la confianza en sí mismo que obtuvo en participar en ese concurso.

Y al menos, él encendiera un poco de interés en la lengua española en su escuela. Sólo eso es un logro.